martes, mayo 27, 2008

Ya es hora de hecerse cargo







Recordar, del latín recordaris: volver a pasar por el corazón



Y salir a la calle y comer helado de rosa bajo la lluvia y ver como mueren los paraguas en el parque, y dejarme ir al vaivén del columpio rojo que está frente a esos juegos plásticos para los más chicos, cerca del emporio y acordarme del calor que hacía en el verano cuando me dejaba ir casi a diario al vaivén de ese columpio rojo, el del parque...

Quizás hasta me compre un paraguas transparente con lunares, en reemplazo del paraguas transparente que no recuerdo haber tenido o que se lo llevó el viento; nací, crecí y viví casi toda mi vida en una ciudad con mucho viento, con muy fuerte viento, seguro debo haber tenido un paraguas así y se lo llevó el viento.

Ahora me dieron nostalgia los paraguas transparentes y las botas de goma azul que compraban mis padres para cuando íbamos al colegio, o no! me puse nostálgica y eso es clara advertencia que me estoy poniendo vieja, la mejor manera de reconocer que una se pone vieja es verse en el espejo con el ceño fruncido y claramente la nostalgia...










8 comentarios:

Claudia Castora dijo...

Ese es el problema de los días lluviosos...nos llenan de nostalgia.
Y es una maravilla.

Daniela dijo...

Es conveniente de vez en cuando ser concientes
de que hoy,
de que ahora
estamos fabricando las nostalgias
que descongelarán algún futuro”

Mario Benedetti.

Rica la lluvia, la casita, el parque....hoy, rica, hasta la spatas helàs x culpa de las botas de goma.......

Voy llegando al viento......

Anónimo dijo...

Los recuerdos suelen contarte mentiras:
Se amoldan al viento, amañan la historia
Por aquí se encogen, por allá se estiran
Se tiñen de gloria, se bañan en lodo,
Se endulzan, se amargan a nuestro acomodo
Según nos convenga, porque antes que nada,
Y a pesar de todo, hay que sobrevivir .

Recuerdos que volaron lejos,
O que los armarios encierran
Cuando está por cambiar el tiempo
Como las heridas de guerra,
Vuelven a dolernos de nuevo.

Los recuerdos tienen un perfume frágil
Que les acompaña, por toda la vida,
Y tatuado a fuego llevan en la frente
Un día cualquiera, un nombre corriente
Con el que caminan con paso doliente,
Arriba y abajo, húmedas aceras,
Canturreando siempre la misma canción.

Y por más que tiempos felices,
Saquen a pasear de la mano,
Los recuerdos suelen ser tristes,
Hijos como son, del pasado,
De aquello que fue y ya no existe.

Pero los recuerdos,
Desnudos de adornos,
Limpios de nostalgia,
Cuando sólo queda la memoria pura
El olor sin rostro, el color sin nombre,
Sin encarnadura,
Son el esqueleto
Sobre el que construimos
Todo lo que somos, aquello que fuimos
Y lo que quisimos y no pudo ser.

Después, inflexible el olvido
Irá carcomiendo la historia
Y aquellos que nos han querido
Restaurarán nuestra memoria
A su gusto y a su medida
Con recuerdos de sus vidas

"Nos pasa a todos,
Papá"

Daniela dijo...

celbro en i, viva drexler, viva latinosmerica, viva cada rincon de este mundo que es nuestro, unico y nuestro...muy borracha jejeje

Tontograve dijo...

ley alquimica.
todo se transforma.

Rodrigo dijo...

saludos C.P.

El otro día, cuando la lluvia era mucha y constante, y por estos lados parecíamos pajarracos entumidos y atontadosde frío, una niña que venia con su paraguas transparente chocó con mi luto paraguas...claro, la vereda era estrecha. Allí se quedo mi paraguas roto a lo largo de un palillo...claro,era tan ordinario el pobre, era de esos que regalan con el vuelto a quienes compran sopaipillas en la calle...

Allí quedó el pobre, en un tarro de basura recien instalado en el paradero del Transantiago.

la proxima vez, me iré por la vereda del frente.

un abrazo, cariñoso-cariñoso.

Tu Christian dijo...

crecí en un lugar de vientos y fue el viento el que me enseño a volar...
de vuelos rasantes a al alto vuelo, tuve que vivir bastante...
adoro el viento, ese que te empuja y te seca las lagrimas, adoro el viento ese que te hace tambalear al borde de un acantilado...

Anónimo dijo...

ojalá el viento borrara las penas y no solo secara lágrimas...