Decir adiós es dar un paso más en la vida, es aceptar que la vida cambia, es revelarse frente a los problemas y buscar soluciones. Decir adiós es respirar hondo y mirar hacia adelante con la esperanza que todo, repito todo, siempre ocurre para mejor. Esa es mi más profunda convicción y la vida me lo ha confirmado una y otra vez...aunque en el momento de la despedida muchas veces he sentido que la vida se me iba...pero luego descubrí que no, que seguía viviendo, que podía ser feliz y que seguía sonriendo. Muchosabrazoscariñososyconversacionesintensas!
No lo sé... "un vencedor nunca renuncia y el que renuncia nunca vence..." dice una canción de Bruce Springsteen... Hay "adiós" de valientes, de cobardes, de vencedores, de perdedores, de los que avanzan o retroceden... Hay tantas clases de "adiós"... lo que es claro es que el que se despide, siempre pierde algo... y, en la vida, hay que saber perder...
Lo que dice Gustavo es terriblemente cierto, pero también es terriblemente doloroso, aunque nadie nunc nos dijo que crecer no lo era, y dejar ir e irse es, en escencia, dolor para volver a nacer. besos.
Si, desde el punto de vista de seguir adelante, de abrirse a una nueva realidad, estoy de acuerdo con el gran Gustavo:) Hay que ser capaces de decir adiòs, sin conformarnos, no quiero ni puedo conformarme. Acabo de hacer una gran renuncia, un gran y doloroso adiòs que me abre a la vida, una nueva. Espero que para vos tambièn, un besazo, Crisan.
Y después del adiós? No sé si yo podría crecer. Qué valientes son las personas que si se atreven para luego volver a crecer!! Hay tantos que se hunden con el sólo pensar en eso...
Si tú lo dices... habré de creerte... pero, entonces, si sabe lo que perdió y está dispuesto a perderlo... créeme que no vale la pena... no merece tu pena... No vale nada el que cree que nada vale... los cobardes y los "perdidos" deberían ser desterrados... hasta que se orienten y adquieran el coraje para "volver a casa".
Perdóname si creo saber algo de ti y opinar sobre ello... pero una mujer que vuela concentra mi atención... y mi preocupación... a riesgo de ser intruso y equivocarme.
A veces soy la que sale corriendo consumida por el miedo o desarmada por el calor, desalmada por la sensación de levedad que me habita...
De agosto cuando se está acabando, de gata como la más de todas, de andar por los tejados y ronronear tan fuerte como me lo permita la almohada que me cobija... de mantenerme alerta, atenta, a cargo, sabiendo que en alguna esquina me doblan la mano...
De alto y bajo vuelo, de noche más que día... de sol por la ventana y de mar, siempre de mar, aunque sea de una ventana o un mirador a la orilla del camino, de playas rocosas y marea alta...
de largas noches y hermosas velas.
14 comentarios:
tancierto.
Decir adios es tambien cruzar un umbral desconocido
Un abrazo
Reponerse o, manejar el dolor pueda ser quizas, si, un crecimiento personal, o claro, tambien la salida un alma tibia. Nos protegemos como podemos.
Saludos para ti...
Agustin
"Poder decir adiós es crecer"...
¡Ughhh!!! Me dolió.
Mahiakeff
Decir adiós es dar un paso más en la vida, es aceptar que la vida cambia, es revelarse frente a los problemas y buscar soluciones.
Decir adiós es respirar hondo y mirar hacia adelante con la esperanza que todo, repito todo, siempre ocurre para mejor. Esa es mi más profunda convicción y la vida me lo ha confirmado una y otra vez...aunque en el momento de la despedida muchas veces he sentido que la vida se me iba...pero luego descubrí que no, que seguía viviendo, que podía ser feliz y que seguía sonriendo.
Muchosabrazoscariñososyconversacionesintensas!
No lo sé... "un vencedor nunca renuncia y el que renuncia nunca vence..." dice una canción de Bruce Springsteen... Hay "adiós" de valientes, de cobardes, de vencedores, de perdedores, de los que avanzan o retroceden... Hay tantas clases de "adiós"... lo que es claro es que el que se despide, siempre pierde algo... y, en la vida, hay que saber perder...
Con todo, él no sabe lo que perdió.
Cariños.
Lo que dice Gustavo es terriblemente cierto, pero también es terriblemente doloroso, aunque nadie nunc nos dijo que crecer no lo era, y dejar ir e irse es, en escencia, dolor para volver a nacer.
besos.
y aquí andamos, jodidos por tener que crecer.
con el sarampión se nos enseña de chicos: crecer duele.
Si, desde el punto de vista de seguir adelante, de abrirse a una nueva realidad, estoy de acuerdo con el gran Gustavo:)
Hay que ser capaces de decir adiòs, sin conformarnos, no quiero ni puedo conformarme. Acabo de hacer una gran renuncia, un gran y doloroso adiòs que me abre a la vida, una nueva.
Espero que para vos tambièn, un besazo, Crisan.
Después del Adios, el vacío.
Luego lentamente el crecimiento. Nada es tan fàcil...
Y después del adiós? No sé si yo podría crecer. Qué valientes son las personas que si se atreven para luego volver a crecer!! Hay tantos que se hunden con el sólo pensar en eso...
Si tú lo dices... habré de creerte... pero, entonces, si sabe lo que perdió y está dispuesto a perderlo... créeme que no vale la pena... no merece tu pena... No vale nada el que cree que nada vale... los cobardes y los "perdidos" deberían ser desterrados... hasta que se orienten y adquieran el coraje para "volver a casa".
Perdóname si creo saber algo de ti y opinar sobre ello... pero una mujer que vuela concentra mi atención... y mi preocupación... a riesgo de ser intruso y equivocarme.
Cariños.
Es junio....dije adios a mayo...sin saberlo se me pasó volando...algunos adioses son así...
un abrazo, crisantemaquerida...
"...Algunas madrugadas me desvelo y ando como un gato en celo..." en fin, me arriesgo a tus alturas y "bajezas", feliz de la vida...
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